Dificultad: 4 (1-6)
Punto de partida: Biniaraix término municipal de Sóller, Mallorca. 80 metros de altitud. Aproximación por GR-221Etapa Refugi Muleta - Refugi Tossals.
Desnivel torrente: 240m. Longitud: 500m. Desnivel en subida andando: 600m.
Tiempo total: 1h 10min ascenso entrada torrente + 4h descenso + 25min andando al coche + paradas.
Material: 2 cuerdas de 30 metros (+ una de seguridad), arnés, 1 cabo de anclaje, descensor + mosquetón. Con agua, neopreno. Todos los rapeles están equipados. Croquis del libro "Els torrents clàssics de la Serra de Tramuntana"/ Miquel Trias y Fernanda Ramon/ Editorial Miquel Font Editor/ ISBN: 84-7967-070-3
Torrentre de roca calcárea, corto pero muy entretenido, sin apenas descansos entre saltos. En varias zonas (gorgas con agua) existen poblaciones de Ferreret, segunda rana más pequeña del mundo, endémica de Mallorca. Ha estado varias veces en peligro de extinción, en Menorca lo hizo tras la llegada de los romanos, que introdujeron predadores que lo exterminaron.
Iniciamos el camino en el pueblo de Biniaraix, tras aparcar el coche en el centro del pueblo, en un lugar donde ya tenemos una buena panorámica de los Picos de Cornador, que llegan casi a los 1000 metros de altitud, (derecha) y del Puig de L´Ofre (1093). Si consideramos que estamos a 80 metros sobre el nivel del mar, no es nada despreciable la altura de estas moles rocosas: desniveles que rondan los 1000 metros justo encima nuestro!
Empezamos a subir por las empedradas y rústicas calles de Biniaraix, un bello pueblo mallorquín que milagrosamente ha conservado su estética original a pesar de la destrucción que la corrupta política urbanística de unos cuantos criminales ha provocado en esta hermosa isla.
Al fondo, Sóller.
Desde el mismo pueblo, un camino concienzudamente empedrado, va ganando altura progresivamente. Se trata del Camí des Barranc de Biniaraix, antigua vía principal de comunicación del valle de Sóller con los valles de L´Ofre, Cúber, Orient, o el Monasterio de Lluc.
En esta zona del Barranco de Biniaraix, las vertientes han sido divididas en bancales para la organización de pequeñas propiedades agrícolas, destinadas en origen al cultivo de olivos y otros frutales. Este tipo de construcciones denominadas ‘pedra en sec’, tan características de la Sierra de Tramontana, suponen un ejemplo de integración en el medio natural, además de ser una de las razones por las que ha sido declarada recientemente Patrimonio de la Humanidad en la categoría de paisaje cultural por la Unesco. Hoy en día, el aprovechamiento de los cultivos es escaso, por lo que resulta inviable su explotación.
Estos bancales han servido de refugio a una serie de animales y plantas, desarrollándose además un tipo de vegetación exclusiva de la montaña mallorquina, más información aquí.
Conforme ganamos altura, vamos dejando atrás las casas de ca'n Catí, un conjunto de casas de estética puramente mallorquina integradas en los bancales
Aunque no de forma muy clara, entrevemos a la izquierda el torrente que en breve vamos a descender. Nos aproximamos al fondo del barranco.
La zona se halla atravesada por una extensa red de caminos empedrados.
Picos de Cornador, pasamos una valla, la pendiente se suaviza y enseguida nos desviamos a la derecha para buscar la entrada del torrente, descendiendo unos metros.
Justo en el momento de desviarnos del camino principal, panorámica sobre el Barranc de Biniaraix.
Principio del torrente. Altamente recomendable con agua, peligroso después de fuertes lluvias, y frío en los meses de invierno.
Primer rapel del descenso, tobogán de 13 metros. Vista desde arriba.
Vista desde abajo.
Salto de 9 metros (ver croquis adjunto) desde arriba.
Desde abajo.
Agua estancada, fría, negra y un tanto maloliente...
Un poco más abajo, nos encontramos con una oveja muerta, despeñada, se la estaban comiendo las larvas.
Último rapel, con final en Gorg de Can Catí.
A pesar de ser un torrente corto, se hace largo por la cantidad de rapeles que hay que hacer, apenas se anda...
Una vez hecho el último rapel, guardamos material, y a unos pasos tenemos el camino de vuelta con una zona de merendero, pero como es tarde, comemos algo rapidamente y nos vamos al coche de vuelta por el GR-221.