De la Punta de las Olas al Perdido

Itinerario: Pradera de Ordesa: 1300m - Cuello de Arrablo - Punta de las Olas - Baudrimont SE - Añisclo - Baudrimont NW - Espalda - Monte Perdido (vivac).

Desnivel acumulado: +2600m.

Tiempo: 9h 45min con paradas. 

Dificultad: F

Me acerco con David a Torla, donde tomamos el autobús hasta la Pradera de Ordesa para seguir direcciones diferentes con la intención de vernos en la cima del Perdido, donde dormiremos para mañana hacer el Dedo y alguno más. Yo tengo pendientes los tresmiles entre la Punta de las Olas y el Añisclo, y él como ya los tiene, va a hacer una ruta bastante exigente teniendo en cuenta que vamos cargados: Pradera-Faja Racón-Clavijas Cotatuero-Senda bajo la Peña Tobacor-Goriz-Espalda de Marboré-Tuqueta de Marboré-Monte Perdido.

9.10. Empiezo a andar desde el parking de la Pradera recorriendo a paso ligero el hermoso valle de Ordesa. Un trámite de casi 9 kilómetros que siempre merece la pena...Vista del Perdido (izquierda), donde dormiré esta noche.

11.00. En la Cola de Caballo sólo hay una chica que parece alegrarse de ver a alguien que le pueda hacer una foto. Paso las clavijas de Soaso, qué pulida está la roca...y sigo los primeros zig-zags que conducen a Goriz hasta superar la primera gran muralla rocosa, momento en que abandono el sendero a mi derecha en dirección al collado de Arrablo. El sol pega fuerte y me empiezo a cansar, así que tengo que parar a comer algo. Quizás he subido muy rápido por el valle con todo el peso de la mochila (crampones, vivac, cuerda, etc).

Alcanzo el GR11 y tras un par de zig-zags y cruzarme con algún montañero solitario llego a las 12.30 al Collado de Arrablo, 2343. Vistas hacia la Torre de Goriz y a la derecha la Punta de las Olas.

Sigo el GR-11 que de forma progresiva va ganando altura bajo las laderas de la Punta de las Olas...Me empieza a preocupar el agua, ya que varios torrentes que aparecen en el mapa están secos. Además, estoy flojeando y se me está haciendo eterno este tramo.

 

Sobre la cota 2500 encuentro por fin un pequeño torrente de agua que me da un poco de ánimo. El Cañón de Añisclo queda relativamente cerca. No me cruzo con nadie, sólo veo un montañero detrás mío a unos 10 minutos.

Sigo avanzando lentamente, no hay forma de recuperar, incluso los gemelos están amenazando, sí que me han machacado ese valle... 

Sobre la cota 2700 abandono el GR11 para seguir un sendero confuso que avanza por el pedregal hacia la muralla rocosa previa a la cima de la Punta de las Olas. Cuando me acerco observo que igual me he anticipado un poco y tenía que haberme desvíado algo más adelante por sendero más definido, porque llego a un paso con los metros finales bastante verticales y un cordino de protección, que no tiene nada que ver con la trepada fácil que yo había leido en varias reseñas.

Pero no quiero dar marcha atrás y perder tiempo, y lo supero no sin ciertas dificultades en su parte final: unos 5 metros sin apoyos ni agarres para las manos definidos, tan solo una serie de fisuras y tubos paralelos que obligan a tirar de físico, lo cual resulta bastante incómodo con la mochila y los gemelos bien cargados como los tengo. III+ ó IV-.

Una vez superado, la cima se ve muy cerca.

 

El Añisclo se ha cubierto bastante, esperemos que no empeore porque en la zona alta es fácil perderse sin visibilidad y no llevo GPS.

Desde la arista cimera, vistas al valle de Pineta y Collado de Añisclo.

 

Respiro la cota tresmil y me siento mejor, se me va el cansancio, las piernas ya no se quejan y consigo subir los últimos metros con más alegría. Me cruzo con dos que andan más ligeros.

y luego a otros dos en la cima, parece que no estoy tan solo.

14.25. Punta de las Olas, 3022.

Sigo sin detenerme mucho. Desde aquí el encadenamiento de tresmiles se intuye fácil.

Hacia atrás, Punta de las Olas

Llego a los pies del Baudrimont SE, donde dejo la mochila (qué placer xD) y subo a la cima por la cara Sur (pocos hitos) tras un corto paso liso pero inclinado más incómodo que otra cosa (II-).

14.55. Cima Baudrimont SE.

Hacia Pineta

 Espectacular vista hacia el Valle de Pineta, con la Punta de las Olas a la derecha.

El itinerario a seguir hasta la cima del Añisclo es evidente.

Monte Perdido. Por ese nevero subiré en unas horas. Esta vista tiene cierto paralelismo con su cara Oeste (escupidera y Lago Helado).

Cuando bajo me cruzo con un montañero con el que converso un poco y cuando llego a la mochila paro a comer algo. Un grupo sube también a la cima.

Tras una parada de 20 minutos continúo hacia el Añisclo. Vista hacia atrás, Baudrimont SE y Punta de las Olas. 

Por aquí dejo la mochila y empiezo a subir por pedrera suelta mientras observo a tres montañeros que bajan del Perdido justo enfrente mío. Han bajado por el contrafuerte Este del Perdido para evitar el nevero y destrepan por terreno delicado por encima de las betas marrones.

Los casi 250 metros de desnivel hasta la cima los supero más rápido de lo esperado, llegando previamente a una arista cimera, que me llevan en unos metros a su parte más alta.

16.00. Cima del Añisclo, 3259. A pesar de que el Perdido está tapado, las vistas hacia Pineta impresionan.

Aprovecho que tengo cobertura para mandar un mensaje a David y que sepa por dónde voy más o menos, calculo que ahora estará de camino a la Espalda de Marboré. Bajo a por la siguiente cima, para lo cual desciendo la barrera rocosa que me separa de esta gran canal por viras en zig-zags sin dificultades hasta los pies del nevero que cae del Cuello del Monte Perdido.

Seguiré por el filo de la arista sin dificultades, con algún paso con cierta exposición evitable por la derecha (Sur)

 

Desde la arista, vista del Cuello del Monte Perdido con la cima detrás, parece que voy a tener suerte y se van a ir las nubes.

16.43. Baudrimont NW.  

 

Vista del Baudrimont SE y Punta de las Olas.

En la cima de la Espalda de Esparets están los tres montañeros que había visto desde el Añisclo que bajaban del Perdido. Para llegar hasta la cima cruzaré el nevero por la parte de arriba.

Cuando bajo del Baudrimont me encuentro con los tres montañeros que vuelven de la Espalda. Me comentan que la bajada del Perdido no estaba tan mal, a mí tampoco me lo parece...y empiezo a pensar que el kilo y pico que pesan los crampones me lo podía haber ahorrado... En una carrera me voy a la Espalda, que está más cerca de lo que parece. Subo por la canal central, que a pesar de lo que parece, se hace prácticamente caminando.

17.20. Espalda de Esparets, 3077. Maravillosas vistas, con el Glaciar del Monte Perdido y el Valle de Pineta. Muchas veces las mejores vistas no son desde las montañas más altas.

 

Bajo por el mismo sitio y como voy bien de tiempo me lo tomo con tranquilidad y aprovecho los últimos rayos de sol para comer algo y descansar. Tras aprovisionarme de agua a los pies del nevero y ponerme los crampones, empiezo a subir ya cansado hacia el Cuello del Monte Perdido. Está claro que me podía haber ahorrado los crampones, por el lado de la izquierda también podría haber trepado sin problemas.

18.35. Cuello del Monte Perdido. Me despido de los Baudrimonts iluminados por los últimos rayos de sol del día.

Desde el Cuello se trepa por roca descompuesta (fácil) para encarar las últimas laderas hacia la cima del Monte Perdido. La arista al Añisclo no tiene mala pinta.

18.55. Monte Perdido, 3355. Hay tres personas en la cima pero ni rastro de David, pensaba que iba a llegar antes que yo, pero luego me doy cuenta de que seguramente su recorrido sea bastante más largo que el mío. 

Vista del Cilindro, al fondo el Taillón.

Cañón de Añisclo y Ordesa

Panorámica hacia Pineta

Ahora toca relajarse, hacer fotos, ver la puesta de sol, cenar tranquilo. Cosas que no siempre se pueden hacer en un vivac en la montaña.

Hablo un rato con mis compañeros de vivac, dos de ellos son franceses aunque uno habla bastante bien español y me hace esta foto. Comentamos las cimas que se ven en el horizonte, la ruta que hemos hecho en el día, etc. 

Mientras, la sombra del Perdido se proyecta sobre el valle y el Añisclo se resiste a caer en la sombra.

Como David no hace acto de presencia (supongo que dormirá en el Lago Helado), me acomodo en el vivac que queda libre hacia el lado de Pineta, el más pequeño pero perfecto para uno.

Desde el vivac principal, el sol a pocos minutos de ocultarse recorta las siluetas de montañas que ya conocemos. Echo de menos la cámara buena, aunque siempre es bueno tener una razón más para volver a este incomparable mirador.

Sobre las 20:30 escucho un leve ruido de bastones, me asomo y ahí llega David bastante machacado que me comenta que su GPS le marca que ha hecho 35 kms. Pradera de Ordesa - Faja Racón - Clavijas de Cotatuero - Senda bajo la Peña Tobacor (interminable) - Goriz - Espalda de Marboré - Tuqueta de Marboré - Monte Perdido.

Llega justo para ver la puesta de sol, aunque creo que con el cansancio no la disfruta mucho.

Cuando el sol se oculta y una esplendorosa luna llena aparece por el Este, doy las buenas noches y me retiro a mis aposentos. Me regocijo pensando en el incomparable momento que me espera en unos minutos, después de que acomode la esterilla y me meta en el saco calentito en un entorno tan espectacular como éste cuando otros pagan fortunas por dormir entre cuatro paredes. Mañana nos tocan las últimas cimas de la lista oficial de tresmiles del Pirineo, una lista que quizás haya que renovar pronto, pero que nos ha llevado a descubrir muchos rincones e infinidad de buenos momentos. Pero lo haremos como nunca hasta ahora lo habíamos hecho: sin prisas.